La novela transcurre en tiempos de Alejandro VI, en la época de los Médicis. Un monje, Savonarola, predica en nombre de Dios. Es un fanático que arremete contra todo el mundo acusándoles de ser pecadores. El mismo Papa acabará poniéndose en su contra. Al final será procesado y Florencia se liberará de la tiranía de este loco.
La protagonista Alexandra, una joven culta cuya mayor pasión es la pintura, hija de un rico comerciante de telas se casa, como era habitual entonces siendo muy joven, con un hombre elegido por sus padres
Su marido Critóforo, mayor que ella, de muy buena posición, es culto, amable y apasionado del arte. La noche de bodas su esposo le confiesa que es homosexual. Su amante es uno de los hermanos de su mujer, Tomaso. Alexandra tendrá que aprender a vivir con esto. Su cometido es darle un heredero a su esposo. Alexandra engendrará una hija, evidentemente de otro hombre...
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